Entrevista a Teresa Bladé, QC Laboratory Manager & Product Approvals en Amiblu Pipes Spain   #SomosAmiblu

Teresa Bladé es QC Laboratory Manager & Product Approvals en Amiblu Pipes Spain.  Afirma que lo que más le gusta de su trabajo en Amiblu Pipes Spain es la relación con sus compañeros y la proactividad de la compañía. «Somos una empresa que siempre apuesta por proyectos innovadores y atrevidos. Cada proyecto es más ambicioso que el anterior, con nuevos retos que exigen renovarse y documentarse continuamente, lo cual implica estar vivo y formándote para poder crecer profesionalmente». Nos habla de éste y de otros temas, a continuación. 

¿Cómo es el ritmo de trabajo en una planta como la de Amiblu?
El ritmo de trabajo en Amiblu es vertiginoso. Siempre vas con el acelerador pisado a fondo y nunca he tenido la oportunidad de sentir la sensación de aburrimiento. Esto, a veces, provoca ciertas tensiones y estrés, pero también te permite adquirir mucha habilidad y agilidad para reaccionar, de forma rápida, en la resolución de problemas.

Descríbenos un día laborable en Amiblu.
Mi jornada laboral empieza a las ocho de la mañana. Durante el trayecto que tengo desde mi casa a la fábrica refresco las tareas prioritarias a realizar. Si preveo que el día va a ser más intenso de lo habitual, me pongo música cañera para afrontarlo con energía.
Cuando llego a la fábrica, lo primero que hago es ir a saludar al personal del laboratorio. A continuación, reviso con ellos si ha habido alguna incidencia durante mi ausencia y, si es así, miramos la afectación y cómo debemos proceder.
A partir de las 08:30 h, que es cuando la mayoría del personal de oficinas se incorpora, empiezan las reuniones, visitas, auditorías, preparación de documentación para los clientes… Y, sin darme cuenta llega la hora de comer. Aunque comemos en la mesa de trabajo, en este momento intentamos desconectar un poco, charlamos de nuestras cosas y siempre intentamos reírnos mucho; así el día se hace más llevadero.
Después de comer, continuo con las tareas que me han quedado pendientes de la mañana, organizo las tareas del siguiente turno del laboratorio y planifico el día siguiente.
Lo cierto es que la descripción anterior corresponde a la de un día ideal, en el que las cosas van rodadas y no hay imprevistos, pero no siempre es así. Hay días en los que me paso toda mi jornada laboral a pie de máquina analizando con mis compañeros de producción las posibles causas de las incidencias, revisando tubos en la campa, preparando instrucciones sobre cómo proceder cuando aparecen incidencias semejantes… Es decir, vamos actuando e improvisando en función de los resultados.

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?
La relación con mis compañeros. Y es que, con algunos de ellos paso más tiempo que con mi propia familia. Esto crea un vínculo que es indispensable para continuar trabajando con motivación. Es cierto que, a veces, también tenemos pequeñas discusiones generadas por picos de estrés, al igual que en todos los buenos matrimonios, pero la confianza que nos tenemos hace que seamos capaces de solucionarlo de manera rápida y siempre con una sonrisa.

Hasta la fecha, ¿cuál es el momento más divertido que recuerdas con tus compañeros de departamento?
Es difícil seleccionar solo uno ya que, aunque mi apariencia es la de una persona seria, me gusta mucho reírme, y de quien más me río es de mi misma. En nuestro departamento intentamos reírnos, por lo menos 2 o 3 veces al día.
Uno de los momentos en que más me he reído, y aún me río cuando lo recuerdo, fue durante la realización de una actividad en equipo en la convención de empresa del año pasado. En concreto, la actividad consistía en ir en barca de remo hasta un punto del río donde había una plataforma flotante; al llegar allí teníamos que coger unas pelotas y llevarlas hasta la orilla. Aquí se demostró que somos una empresa en la que a nadie le gusta perder; somos muy competitivos. Había compañeros que saltaron de barca en barca y se tiraron a la plataforma como verdaderos kamikazes, otros que querían volver tan rápido que dejaban al compañero en medio del río… La verdad es que fue increíblemente divertido.

Explícanos algún proyecto de tuberías de PRFV que recuerdes por su singularidad.
En Amiblu casi todos los proyectos que se realizan tienen alguna singularidad que los diferencia del resto. Somos una empresa que siempre apuesta por proyectos innovadores y atrevidos. Uno de los proyectos que más me ha impactado, por ser uno de los primeros en los que participé, en el año 2009, fue la obra de Al Khalij en la que fabricamos decenas de kilómetros de tubería de PRFV de diámetro DN3000 para un emisario submarino. Esta obra, que duró más de un año, fue muy complicada y larga. En concreto, contaba con unos manguitos especiales, los tubos llevaban unos sistemas de cloración internos, y, diariamente, teníamos un inspector en la fábrica que revisaba los tubos, los ensayos del laboratorio y toda la documentación de calidad que preparábamos…

Si no te hubieses dedicado a ser Gerente de Laboratorio de Control de Calidad, hubieses elegido ser…
Sin ninguna duda, profesora de educación infantil o especial.

Amiblu ha iniciado un proceso interno de transformación para reducir el impacto ambiental de sus productos y contribuir al ahorro energético. ¿Qué opinión tienes sobre el mismo?
Considero que somos una empresa con una gran concienciación ambiental y que apuesta muy fuerte e invierte muchos recursos para reducir al máximo el impacto que nuestro proceso productivo pueda tener sobre el medio ambiente. Ejemplos de ello son las instalación de más de 2.000 paneles solares en nuestra planta de producción, el consumo de energía verde, las plantaciones de árboles, etc.

Amiblu es una empresa que…
No tiene límites. Cada proyecto es más ambicioso que el anterior, con nuevos retos que exigen renovarse y documentarse continuamente, lo cual implica estar vivo y formándote para poder crecer profesionalmente.

Al salir de Amiblu te encontraremos…
Compartiendo tiempo con mi marido y mis tres hijos, disfrutando cada minuto de mi tiempo libre, realizando actividades al aire libre para despejar la mente, haciendo deporte… Es decir, realizando actividades que impliquen movimiento; soy una persona muy inquieta.

¿Cómo te imaginas el futuro?
Este año, por desgracia, ya que una compañera mía a la que tengo gran aprecio está pasando por una enfermedad grave, he aprendido que nunca debes ponerte metas a largo plazo, sino que lo importante es disfrutar de cada minuto que te ofrece la vida. Por tanto, mi futuro me lo imagino haciendo un trabajo que me llene, que me permita disfrutar del día a día y de cada uno de los momentos al máximo, en el que siga creciendo profesional y personalmente, aceptando nuevos retos y que estos me permitan aprender y poder compartir mis conocimientos con todo mi equipo.